» Psicología Positiva»
¿Qué es esto de la psicología positiva de la que tanto se habla ahora?
La psicología positiva surgió en los 90 de la mano del psicólogo americano Martin Seligman. Pero ya Aristóteles hablaba de ella cuando se refería a la Felicidad.
La Psicología positiva estudia las bases del bienestar psicológico y de la felicidad.
También son objeto de su atención la realización personal, la inteligencia emocional, la resiliencia….aspectos que hacen que los seres humanos superen situaciones difíciles con éxito y por tanto contribuyan al Bienestar (bien-estar).
Tradicionalmente la psicología se ha dedicado al estudio de los aspectos negativos y patológicos del ser humano, de lo que estaba mal o no funcionaba, de las enfermedades mentales y de los desajustes psicológicos de los seres humanos.
En los estudios de psicología ( ya sabéis que a los/las psicólogas nos gusta hacer estudios de todo :). Desde este enfoque lo importante era la media, lo «normal», entendiendo por normal la respuesta de la mayoría, y se desechaban las puntuaciones que sobresalían por encima y por debajo. Para la psicología positiva en cambio, lo importante son los valores que sobresalen, las puntuaciones que se quedan por encima de la media y que representan a las personas que no han respondido con la media, sino que han respondido de una manera más adaptativa a las situaciones e incluso de una manera más original.
El estudio de estas personas «sobresalientes» en las curvas de medición, da a la psicología positiva la base para estudiar cuales son los mecanismos que utilizan estas personas para conseguir sobresalir en bien-estar. Por eso en lugar de estudiar los mecanismos que nos hacen enfermar, la psicología positiva estudia los mecanismos que no sólo nos mantienen mentalmente sanos/as, sino los mecanismos que nos llevan a la FELICIDAD.
Pero ¿Cuál es la fórmula de la Felicidad?
Existe una teoría de la Felicidad y el éxito que dice que:
Si trabajas duro, tendrás éxito y el éxito te dará la felicidad.
¿Crees que esto es así?, ¿Estás de acuerdo?
Pues bien, el investigador Shawn Achor, ha realizado varios experimentos en los que ha llegado a la conclusión de que la formula de la Felicidad y el Éxito no es así, sino que para conseguir la felicidad hay que invertir la fórmula, cambiar el orden.
La Felicidad no es el fin, es el punto de partida
La fórmula invertida sería:
Si eres feliz, disfrutarás de tu trabajo y esto te llevará al éxito.
Con la vieja fórmula, alcanzar la felicidad es poco menos que imposible, ya que te quedas estancad@ en el éxito. Cada vez que consigues una meta, que tienes un éxito, la meta cambia, y cambia porque te planteas otra mayor. Si tu meta es correr 2 Km, cuando los alcances te sentirás capaz de correr 3Km y luego 3,5 y así no llegas a alcanzar nunca la felicidad porque tus metas van cambiando continuamente, es como si nunca fuera suficiente, como si siempre faltara algo para poder ser feliz.
Pensamos que hay que tener éxito y luego ser felices, pero el cerebro trabaja en el sentido contrario. Primero nos sentimos felices y después llega el éxito. Me explico:
«Si hoy consigues elevar el nivel de positivismo en tí, entonces sentirás lo que se llama una ventaja de felicidad , o sea, un cerebro en positivo y éste funciona mucho mejor que cuando está en negativo, en neutro o estresado. El cerebro en positivo es un 31% más productivo que el negativo, neutro o estresado…. se ha demostrado que las/los médicos son un 19% más rápidos, precisos y acertados en sus diagnósticos cuando tienen su mente en positivo» (Achor, 2014)
Por tanto, si encuentras la manera de volver tu cerebro más positivo en el presente, lograrás aún mayores éxitos ya que habrás conseguido trabajar más duro, más rápido y con más inteligencia.
La Dopamina se libera en el cerebro cuando eres positiva, esta sustancia tiene dos funciones: te hace sentir feliz y activa los centros de aprendizaje permitiendo que te adaptes al mundo de una manera diferente, generando por tanto mayor probabilidad de éxito.
Por eso el truco está en mantener tu mente en positivo, eso no quiere decir que, como piensa mucha gente, que haya que pensar todo el día en cosas positivas a pesar de que la situación no lo sea. No se trata de hacer el cuento de Antoñita la fantástica, sino de buscar soluciones ingeniosas a los problemas, de plantearte alternativas, de pensar que hay posibilidades, pero que aún tú no las has encontrado, de no rendirte.
En el próximo artículo te muestro la manera de entrenar tu mente para que funcione en positivo.
Y recuerda:
La Felicidad no es el fin, es el punto de partida